26 de noviembre de 2018
Ficha en la web:
El Cádiz tocó fondo en Extremadura. Ayer en Carranza ante Las Palmas posiblemente ha tocado techo. Con la misma naturalidad que se dijo lo uno, se dice lo otro.
Salvi y la jugada del segundo gol cadista lo personifican. Un puñal por la derecha, jugada al primer toque que haría llorar de emoción a Cruyff, y remate por supuesto de Manu Vallejo, que es el otro nombre que simboliza lo que es el Cádiz ahora.
Como bien recordaba nuestro sacerdote Cervera, ellos tuvieron el 72% de posesión, y lo que quedó sin embargo fue que el Cádiz pasó totalmente por encima de su rival. El técnico de los visitantes, alineado con el nuestro, que también destacaba que "corrimos cuatro kilómetros más", afirmaba que el Cádiz jugó con una marcha más.
En resumen, cuando este Cádiz ha encontrado su dibujo en el campo (increíble ver que Alex Fernández no tenga sitio en el mismo), y se encomienda a la velocidad de bandas, a la presión a su rival por todo el campo, y a ponerse por delante en el marcador. Con todo eso, es realmente difícil que se le pueda hacer doblar la rodilla. Por mucho que venga de jugar en Primera.
Foto: La Voz