05 de junio de 2019
Ficha en la web:
Cinco empates seguidos, jornada aplazada, gol imposible del rival, jugadores con sus selecciones...demasiados tumbos de un Cádiz que una vez más, terminó cayéndose tras venir sufriendo mucho para sumar desde que certificara la permanencia. Temproada casi calcada a la anterior y muy parecida a la primera, aunque aquella tuvo un final mucho más feliz.
El Cádiz, como ha criticado Cervera, no fue el Cádiz, y apenas hizo méritos para ganar un partido ante un rival para el que deportivamente no había nada en juego y que venía de pasar días muy duros, pensando en cualquier cosa menos en este encuentro. Pero en el césped...no se vieron argumentos.
Para colmo, la ausencia de los dos máximos goleadores, con sus selecciones, volvió a sacar a relucir las insultantes carencias en ataque de este equipo. Ni Lekic, ni Renella ni Barco (que pudo haber dejado solo a Querol en la jugada clave del partido pero se la entregó mansamente al portero sin mediar defensa de por medio) disparan con pólvora seca.
Ahora hay que esperar dos milagros, que el Cádiz gane en El Molinón (hace mes y medio que no suma una victoria el cuadro de Cervera) y más difícil todavía, que el Deportivo falle ante un Córdoba descendido hace muchas semanas. Fue bonito mientras duró, y pasados los días, sabremos de nuevo apreciar estar en la LFP codeadonos con los mejores.
Foto: La Liga