Jugador que destaca pronto en la cantera del Cádiz (en la que ingresó ya en infantiles) y que en junio de 2013, salta a la primera línea de actualidad del club al firmar como profesional por tres años. Gaucci, preocupado por no tener otro caso Jaime, lo incluye en el plan de blindaje de jóvenes valores de la cantera.

Raúl Agné, en su segundo año, ya contó con él en varios entrenamientos, siendo un jugador importante para el filial con sólo 18 años. Al año siguiente, ya con Calderón en el banquillo, el mediapunta se convierte en jugador de pleno derecho de la primera plantilla. Ni ficha del filial, ni gaitas. Ficha profesional sub23, con los mismos derechos y obligaciones que el resto del plantel.

Pero fue sólo sobre el papel: la competencia era durísima en su puesto (Espinosa, Mantecón, Navarrete, etc...) y ya desde la pretemporada se vio que iba a tener casi imposible colarse en las alineaciones de la escuadra amarilla. La llegada de Claudio tampoco arregló las cosas: el valenciano no discutía sus innegables cualidades técnicas (le premió dándole algunos minutos en el duelo copero contra el Villarreal) pero las exigencias de ascender requerían otros perfiles.

En el mercado invernal, como pasó con otros canteranos, se empezó a hablar de posibles cesiones para que dispusiera de minutos, pero al contrario que el resto de compañeros, Galindo decidió desvincularse por completo de la entidad, para fichar por el Sevilla FC

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