Dos años ha estado en Australia. Tras su retorno fallido en Cádiz (nadie pone en duda su esfuerzo, pero lo cierto es que la temporada, tanto suya como del equipo, fue un desastre), y un año en Lugo, el canterano Pablo Sánchez se marchó al otro extremo del mundo, para jugar con el Adelaide United de Australia.
Allí conquistó títulos y volvió a ser importante, pero le ha llegado el momento de volver. De momento, lo hará en la categoría de bronce otra vez, aunque en uno de los gallitos, el recién descendido Llagostera, al que espera ayudar a volver al fútbol profesional