23 de abril de 2017
Ficha en la web:
La brillante temporada 80-81 siempre se recordará por aquel ascenso en Elche tan inesperado como satisfactorio.
Pero no tantos cadistas sabrán o recordarán que el Cádiz hizo también un papel más que digno en la Copa aquella temporada, y que recibió una visita histórica en Carranza a merced de este torneo.
Después de eliminar a dos rivales de la provincia con relativa solvencia (Algeciras y San Fernando), el sorteo emparejó a los amarillos nada menos que contra toda una Real Sociedad. El equipo txuriurdin contaba esos días con hombres de la talla de Gorriz, López Ufarte, Satrústegui, Zamora o Arconada.
Todos ellos vieron como el conjunto cadista, plagado de canteranos, era capaz de empatar en Atocha en la ida por 1-1. Desgraciadamente para nuestros intereses, el cuadro vasco dio la vuelta a la eliminatoria en la Tacita de Plata, teniendo que apurar hasta el minuto 81 para hacer el tanto que desnivelaba la balanza.
Demostró el Cádiz entonces, poniendo contra las cuerdas al que sería flamante campeón de liga meses después, que tenía un equipazo aquella temporada (que habría ser el soporte de toda la maravillosa década que estaba por venir) y que el ascenso no fue, ni mucho menos, casualidad.