06 de mayo de 2018
Ficha en la web:
Parece que vamos a ahogarnos en la orilla, una verdadera lástima. El Cádiz se hunde, despacito, como si estuviera en arenas movedizas, en la clasificación. Aunque los demás se mueven también muy lentos, a estas alturas todos los hacen, la evidente falta de gol del equipo amarillo, que suma ya siete jornadas sin ganar, indican irremediablemente que salvo cambio drástico, el premio del playoff se perderá en el último instante después de una temporada notable.
El Cádiz lleva todo el año galopando sobre los dos caballos de las bandas, y ya más no se puede. Hoy se lesionaron los dos, y si ya es difícil con ellos, porque los rivales se saben el cuento ya de memoria, y porque los compañeros que están en punta (por más rotaciones que haga Cervera entre Jona, Barral y Carrillo) no atinan siqueira a tirar entre los tres palos, no digamos ya sin ellos.
Solo de penalti pudieorn hoy los amarillos mandar el cuero al fondo de las redes. En la segunda parte, con las lesiones mencionadas de Salvi y Alvaro García, todavía se encontró el camino al área en alguna ocasión, pero esta vez le tocó a Dani Romera mandar el balón fuera para desesperación de los que veíamos el partido, fuera en el campo o por televisión.
Quitando el accidente ante el Sevilla Atlético, los partidos del Cádiz se cuentan por un gol por partido (en todo 2018 solo en tres ocasiones se hizo más de una diana) y no siempre se puede contar con que los rivales no marquen, pese a que seguimos siendo la defensa más sólida.
Toca hacer una hombrada ante todo un Real Zaragoza para seguir soñando. Por ilusión, que no sea
Foto: La Voz