26 de noviembre de 2019
Ficha en la web:
Victoria de muchísimo mérito, de líder incontestable, de equipo que huele a Primera por mucho que los más cautelosos le quieran poner freno. El Cádiz tenía varios handicaps (que ahora repasaremos) y los superó todos, cuajando un partidazo en el que fue dominador de principio a fin. Creíamos que el Cádiz tenía solo un registro...y ayer pasó por encima del Lugo usando otras armas, las que requería la situación.
Porque los de Cervera empezaron perdiendo antes casi de salir del vestuario por un error más que grosero de Rhyner que evidenció su inactividad, puesto que no juega desde la segunda jornada. Las lesiones le obligaron a salir y no pudo empezar peor.
Los amarillos, que suelen encontrarse mejor con el marcador a favor, se echaron el partido a la espalda y con un Alex otra vez inmenso en la creación, y con Garrido y Jose Mari dando otra clase de recuperación y toque, fueron construyendo un partido en el que el balón estaba constantemente en el campo del rival, y a base de insistencia, terminó rompiéndose el cántaro.
Se tuvo que reponer también el Cádiz al mazazo de ver como le anulaban un gol que habría traído la igualada mucho antes. La cámara con la que traza la línea el VAR para el fuera de juego es casi denunciable. Nano Mesa fue más rápido que su rival pero esta vez no tocó que el gol subiera el marcador. No pasa nada, el Cádiz vuelve a levantarse.
El Cádiz es coral y así lo demuestra el partido de ayer. Los goles de la remontada los materializó Iza, que está haciendo una temporada de ensueño. Cuando tus delanteros se topan con el portero rival (o el mencionado VAR), llega él desde atrás para romper a la defensa rival. Si el primer gol es bueno, el segundo es una obra de arte que pocos jugadores pueden firmar.
Y que es coral se demuestra en que ante tantas lesiones, Cervera tuvo que tirar de dos canteranos como Javi Navarro y Sergio González. Esos fueron dos de los tres cambios del líder de Segunda. Y ambos fueron determinantes. El primero demostró que hay extremo para rato en Carranza. Velocidad y desborde a raudales, y solo le faltó el premio del gol. Y Sergio González, que tiene que competir contra los tres mejores medios de la categoría, no sólo entró, sino que le puso el mismo temple que sus mayores, cortando varias acciones de peligro cuando el rival más apretaba.
Es muy difícil pedir más. El propio Cervera reconocía en rueda de prensa que sus jugadores le habían dado una lección. No diremos tanto, pero desde luego quedó claro que el Cádiz ya no solo tiene un camino para ir hacia la victoria, y que falte quien falte, hasta el último futbolista está perfectamente engranado en esa maquinaria.
Que vengan los pesimistas. Si es que queda alguno
Foto: cadizcf.com