21 de junio de 2020
Ficha en la web:
No da tiempo para mucho más análisis. El Cádiz quema otra jornada del calendario futbolístico mirando a todos por el retrovisor y con una ventaja considerable. El empate, que sabe a poco en casa (aunque de casa ahora en esta "nueva normalidad" tiene mucho menos), no es malo dados los otros resultados, y ya asoma el Huesca, uno de los partidos clave del año.
Sorprendió Cervera con un once muy ofensivo, algo que ya dejó caer cuando en días anteriores avisaba que con el juego de siempre lo mismo ya no daba. Con Jurado de titular para controlar más el balón y tener más posesión, y dos delanteros. Y no se le dio nada mal al Cádiz el cambio radical de estilo.
El balón se movía y circulaba deprisa, pero también es cierto que las ocasiones no terminaban de llegar para los de Cervera, que no lo vio claro y al descanso ya hizo dos cambios, dando entrada a Jose Mari, uno de sus contrapesos en el centro del campo.
No dio tiempo para que el cambio de sistema se pusiera en práctica. Otro error de la defensa amarilla (tras un regate colosal de Ernesto a Pacha Espino), que dejó que los delanteros rivales remataran dos veces, daba lugar al 0-1, otra vez el Cádiz tenía que remontar.
Cervera volvió a mover las piezas, y esta vez sí, se obtuvo el resultado deseado. Una posesión larga terminaba con Alex regateando y centrando con la izquierda (no tenemos espacio suficiente para alabar la temporada que está haciendo el madrileño) para que el Choco Lozano remachara el empate.
A partir de ahí, el Cádiz lo intentó pero ya con menos efectividad. El Alcorcón daba el punto más que por bueno y no se jugó a casi nada.
Lo dicho, sin tiempo para respirar, hay que ir a El Alcoraz. Casi nada
Foto: cadizcf.com