Drago Milosevic, tras el campanazo de Elche, es inmediatamente renovado, y tiene ante sí la dura tarea de conseguir la permanencia, con un equipo muy joven. Los fichajes suponen un fracaso estrepitoso (Gallis, Pivarnik y Culafic forman parte de la historia negra del club), así que los Pepe Mejías, Juan Jose (que al concluir la temporada ficharía por el Real Madrid), Dieguito, Escobar, Manolito, Amarillo, Chico Linares, Luque, Rosado o Chano, junto a veteranos ilustres como Mané, Hugo Vaca o Dos Santos, los que tienen que sacar adelante la temporada.

El Cádiz ese año gana por primera vez en su historia el Trofeo Carranza, y ya se sabe que, por aquellos años, un buen papel en el trofeo gaditano suele llevar implícito un fracaso liguero y viceversa.

El Cádiz se da el gustazo de proclamarse matagigantes, pero eso no sirve de mucho cuando luego te dejas puntos con los equipos de tu liga, como Las Palmas o Sporting.

Lo que desde luego nadie le quita a los integrantes de aquel jovencísimo y gaditano Cádiz, así como a los aficionados que lo presenciaron, es haber hecho hincar la rodilla en Carranza, uno tras otro, a Real Madrid, Barcelona, Atl. Madrid, Real Sociedad (flamante campeón), Sevilla y Ath. Bilbao. La gran losa, sin duda, fue el pésimo rendimiento lejos de Carranza, donde el equipo gaditano sumó únicamente dos puntos en el último partido de liga, cuando ya no había nada que hacer.