El listón que deja Espárrago está muy alto (el mejor puesto clasificatorio de la historia), pero todo el mundo en el Cádiz es consciente de que la permanencia es ya un éxito inconmensurable.

Irigoyen vuelve a apostar por un técnico extranjero. En este caso es el austriaco Senekowitsch, que enseguida demuestra que no ha sido una buena elección. El mítico jugador y entrenador centroeuropeo no encaja, y la directiva reacciona cesándolo tras siete jornadas, que se saldan con dos pírricos empates.

Esta vez sí, Irigoyen da poderes totales a David Vidal, que tiene ante sí su primera gran oportunidad, amén de la liguilla de la muerte. El gallego se encuentra un equipo que tras siete semanas ya está instalado de lleno en el vagón de cola.

De los fichajes que realiza el club, sólo el húngaro Pepe Szendrei y el malagueño Canillas resultarían un acierto. Los paraguayos Eulalio Mora y Julio César serían sólo bromas pesadas que añadir al capítulo de "pescaitos" de Sulfuro Amarillo, y Onésimo se quedó a medio camino, sin materializar ni un solo gol en toda la liga.

Así que toca repetir la receta de los últimos años: Mágico González desplegando toda su magia en la delantera, y canternos "JASP" que, con sueldos ridículos comparados a los de los fichajes, son los que sostienen el barco a flote. Especialmente valiosos se muestran Cortijo y Jose González, que explotan en su rendimiento, llamando la atención de clubes de mayor envergadura que terminarán siendo sus próximos destinos.

David Vidal y Mágico González mantuvieron una relación de amor-odio que daría la vuelta al mundo. Pero el salvadoreño era el ojito derecho del presidente y de la afición, y el gallego gruñón tiene que hacer encaje de bolillos para encajar al centroamericano en su equipo de gladiadores y establecer las mínimas diferencias de trato y exigencias con respecto a sus compañeros, algo imposible tratándose del genio cadista.

En la última jornada de liga, al Cádiz le basta un empate a domicilio ante el descendido Murcia para certificar su permanencia. Jose González vuelve a erigirse en protagonista y hace el 0-1 que prolonga un año más la estancia de los amarillos en lo más alto de balompié español.